Nombre común: Mandarina
Nombre científico: Citrus reticulata.
Clasificación común: Frutas
Família científica: Rutaceae
Estacionalidad: Invierno.
Principales nutrientes: Vitamina C, Potasio, Fibra, Magnesio, Fósforo
Las mandarinas pueden tener un tamaño pequeño, pero sus beneficios para la salud no pueden pasarse por alto. Las naranjas mandarinas son un tipo de cítrico de sabor dulce, piel fina e interior jugoso y lleno de semillas. Ricas en fibra y vitamina C, las mandarinas pueden consumirse frescas o utilizarse para preparar deliciosos zumos, ensaladas y otros platos. En este artículo, veremos todos los increíbles beneficios de las mandarinas y cómo incluirlas en tu dieta puede mejorar tu salud.
Alto contenido en agua
Una de las propiedades clave de las mandarinas es su alto contenido en agua. Alrededor del 85% de una mandarina consiste en agua, lo que las hace ideales para estimular los mecanismos naturales de la sed de tu cuerpo. También son bajas en calorías y pueden ayudarte a sentirte saciado durante más tiempo. Además, su alto contenido en agua las ayuda a actuar como diurético, lo que es estupendo para reducir la retención de líquidos.
Vitamina C
Las mandarinas no sólo poseen un alto contenido en agua, sino que también son ricas en vitamina C. Esto es una buena noticia, ya que este nutriente esencial puede ayudar a reforzar tu sistema inmunitario, protegerte contra los resfriados y la gripe y favorecer una piel sana. Una sola mandarina contiene hasta 37 mg de vitamina C, lo que puede aportar a tu organismo hasta el 78% de su valor diario recomendado.
Control del colesterol
Las mandarinas también pueden ayudar a reducir el colesterol malo, que contribuye a las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares. La pectina que contienen las mandarinas también puede reducir los niveles de colesterol, al tiempo que favorece la producción de colesterol bueno. Comer una sola mandarina al día puede tener un impacto significativo en tus niveles de colesterol y reducir el riesgo de cardiopatías y accidentes cerebrovasculares.
Prevención del cáncer
Los altos niveles de vitamina C que contienen las mandarinas también pueden ayudar a proteger el organismo contra el cáncer. La vitamina C es un antioxidante que ayuda a neutralizar los radicales libres del organismo, que se cree que causan daños celulares y contribuyen al desarrollo del cáncer. Comer mandarinas puede ayudar a reducir los niveles de radicales libres en el organismo y contribuir a la prevención del cáncer.
Pérdida de peso
Las mandarinas también son estupendas para ayudar a controlar el peso. Con sólo 53 calorías por cada 100 g de mandarinas, son un excelente tentempié, ya que no añadirán demasiadas calorías extra a tu dieta. También tienen un alto contenido en fibra, que ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre y te mantiene saciado durante más tiempo, lo que contribuye a reducir los antojos.
Salud del cabello y la piel
Las naranjas mandarinas también son excelentes para mantener sanos el cabello y la piel. La vitamina A que contienen las mandarinas contribuye a reducir la aparición de arrugas y ayuda a reparar más rápidamente los daños cutáneos. Comer mandarinas también ayuda a mantener el pelo brillante, ya que aportan al organismo vitaminas y minerales esenciales que contribuyen al crecimiento sano del cabello.
Otros beneficios
Además de los beneficios enumerados anteriormente, el consumo de mandarinas tiene otros menos conocidos. Entre ellos, ayudan a tratar la anemia, a mantener una tensión arterial sana, a reducir el riesgo de arteriosclerosis y a tratar el estreñimiento.
Conclusión
Como puedes ver, las mandarinas tienen un sinfín de beneficios para la salud. Tienen pocas calorías, están repletas de vitaminas y minerales importantes, y pueden ayudarte a mantener bajo control el colesterol y el peso. Comer unas cuantas mandarinas al día puede tener un gran impacto en tu salud general, así que no hay excusa para no incluirlas en tu dieta. ¿Por qué no probarlas?